¿Este será el año más caluroso en Puebla? En abril de 2025, la temperatura máxima promedio en la ciudad alcanzó los 29 grados centígrados, pero no es el periodo más caluroso hasta ahora.

Durante abril de 2025, la capital poblana registró una temperatura máxima promedio de 29 grados centígrados. ¿Esto lo convierte en el año más caluroso en Puebla? Aunque está entre los mayores registros, un análisis de los datos de los Resúmenes Mensuales de Temperaturas y Lluvia de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), realizado por Serendipia, revela que el año con la mayor temperatura máxima hasta ahora ha sido 2024.

Por otro lado, el año más frío desde 1967 en la capital de Puebla ha sido 1992, cuando la temperatura máxima registrada llegó a un mínimo de 15 grados centígrados.

2024 fue el año más caluroso, con temperaturas máximas muy por encima del promedio histórico (línea gris oscura). Es evidente que, durante la primavera y el inicio del verano, se registraron picos extremos de calor, especialmente entre marzo y junio.

El 19 de mayo de 2025 también se señala con una línea morada, mostrando una temperatura máxima muy elevada, aunque inferior a los picos extremos de 2024. En contraste, la línea azul representa 1992 como el año más frío, con máximas considerablemente por debajo del promedio en varios tramos del año.

La tendencia general muestra un incremento constante de las temperaturas máximas, con más eventos de calor extremo en los últimos años, lo que evidencia el impacto del cambio climático en la región.

Las noches son más frías en Puebla

Las temperaturas mínimas en la ciudad de Puebla también presentan un aumento progresivo a lo largo de los años. Nuevamente 2024 destaca como el año más caluroso, con mínimas significativamente por encima del promedio durante buena parte del año.

El 19 de mayo de 2025 vuelve a marcarse como un día con temperaturas nocturnas inusualmente altas, una señal preocupante, ya que las noches cálidas dificultan la disipación del calor acumulado durante el día, afectando el descanso, la salud y el consumo energético.

En contraste, el año 1974 figura como el más frío, con varias semanas en las que las temperaturas mínimas estuvieron muy por debajo del promedio.

Este patrón de aumento de las temperaturas mínimas es especialmente relevante porque las noches ya no ofrecen el alivio térmico que solían proporcionar, lo que intensifica los efectos de las olas de calor.

También está aumentando la temperatura media en Puebla

Al analizar las temperaturas medias, 2024 es nuevamente el año más caluroso en Puebla, con temperaturas medias superiores al promedio en prácticamente todos los meses del año, lo que refuerza la idea de un año anómalamente cálido en la ciudad.

El 19 de mayo de 2025 también destaca como un punto con una temperatura media diaria superior a los valores históricos. Esto confirma que el calor extremo no se limita a las máximas, sino que también está elevando las temperaturas a lo largo de todo el día.

Por otro lado, 1974 aparece como el año más frío en términos de temperatura media, con valores sostenidamente bajos, especialmente a partir de julio.

La línea del promedio diario (gris oscuro) muestra cómo las medias han aumentado de manera gradual desde los años sesenta, consolidando una tendencia al calentamiento progresivo del clima local.

¿Cómo se compara Puebla con otros estados?

Aunque Puebla ha registrado un aumento de temperatura, no se encuentra entre las entidades más calurosas del país. En un análisis de las temperaturas máximas promedio durante abril en los últimos diez años, Puebla ocupa el lugar 13 a nivel nacional en incremento térmico.

Por ejemplo, en Nuevo León, la temperatura máxima promedio en abril de 2015 fue de 28.8 grados centígrados, mientras que en 2025 alcanzó 33.5 grados centígrados, lo que representa un aumento de 4.7 grados centígrados en 10 años. Le siguen Coahuila, Durango y San Luis Potosí con aumentos superiores a tres grados.

Comparado con estos estados, el aumento de 1.2 grados centígrados en Puebla puede parecer menor, pero sigue siendo significativo y evidencia un patrón preocupante.