¿Qué es la gentrificación? Es un proceso urbano que transforma barrios tradicionales al atraer a residentes con mayor poder adquisitivo, pero también desplaza a las comunidades originales, generando desigualdad y tensiones sociales.
¿Qué es la gentrificación y por qué se ha convertido en una palabra que despierta tanto debate en ciudades como la Ciudad de México? Este fenómeno urbano, que en un inicio parecía una oportunidad para revitalizar barrios olvidados, hoy genera una profunda división entre quienes ven en él desarrollo y quienes lo señalan como una forma de exclusión social.
La gentrificación ocurre cuando una zona urbana, generalmente deteriorada o con bajos costos de vivienda, se transforma debido a la llegada de personas con mayor poder adquisitivo. Esto incrementa el valor de las propiedades y servicios, pero también desplaza a los residentes originales. En ciudades globales, la gentrificación se ha acelerado con la llegada de nómadas digitales, inversiones privadas y plataformas como Airbnb, que modifican el tejido social de barrios enteros.
Cifras que evidencian el impacto de la gentrificación en la CDMX
En la Ciudad de México, colonias como la Roma, Condesa, Juárez y el Centro Histórico son ejemplos claros. Ahí, los antiguos negocios familiares (cafés, misceláneas, talleres mecánicos) han cedido su lugar a cafeterías de especialidad, coworkings y boutiques con precios en dólares. Según organizaciones vecinales, en la colonia Juárez más de cuatro mil personas fueron desplazadas en los últimos 15 años, un fenómeno que se intensificó con la pandemia y el auge del trabajo remoto.
En colonias como Roma, Condesa y Juárez, los precios de la renta y la vivienda han escalado a niveles que hace una década parecían impensables.
Por ejemplo, en la alcaldía Cuauhtémoc, las rentas promedio subieron de 16 mil 828 pesos a 22 mil 911 pesos entre 2022 y 2023, un aumento de 36 por ciento que supera la inflación promedio nacional en ese periodo. En colonias específicas, como la Condesa, el incremento es aún más dramático: departamentos de dos habitaciones pueden superar los 27 mil pesos mensuales, mientras que en calles como Ámsterdam hay unidades que alcanzan hasta 62 mil 900 pesos mensuales, según datos de portales inmobiliarios.
El auge de plataformas como Airbnb también ha contribuido a este fenómeno. Solo en la colonia Roma Norte, los alquileres de corto plazo pasaron de mil 235 propiedades en 2019 a más de 2,000 en 2023. Este crecimiento ha reducido la oferta de renta tradicional y ha presionado los precios al alza, afectando sobre todo a los residentes históricos.
En al menos nueve colonias de la CDMX, los precios de renta han aumentado hasta 118 % en los últimos años, de acuerdo con datos de Obras Expansión. Entre las zonas más afectadas están:
- Roma Norte y Sur
- Condesa
- Juárez
- Centro Histórico
- Hipódromo
- Escandón
Este panorama ha transformado la dinámica de barrios enteros, donde ahora es común encontrar menús en inglés, precios en dólares y una oferta comercial dirigida a extranjeros y clases medias-altas.
¿Quiénes son los más afectados?
Este encarecimiento no solo impacta a los inquilinos, sino también a los pequeños negocios familiares que históricamente daban vida a estas colonias. Panaderías, librerías y talleres han sido reemplazados por cafeterías de especialidad, bares temáticos y tiendas de diseño.
El fenómeno también está expulsando a las comunidades más vulnerables a las periferias, obligándolas a realizar largos trayectos diarios para trabajar o estudiar en la ciudad. Así, los nuevos habitantes disfrutan de los beneficios de la vida urbana mientras los antiguos residentes se convierten en los “nuevos viajeros cotidianos”.
¿Qué es la gentrificación “a la mexicana”?
En México, el proceso adquiere matices propios. A diferencia de países como Estados Unidos o Reino Unido, donde la gentrificación suele ser impulsada por el mercado, en la CDMX las políticas públicas también juegan un papel central. Programas como el Bando 2 y las Áreas de Gestión Estratégica (AGEs) han favorecido proyectos inmobiliarios que, bajo el discurso de “regeneración urbana”, terminan expulsando a las poblaciones originales.
Ejemplos como la recuperación del Centro Histórico, donde fundaciones privadas participaron activamente, muestran cómo la alianza entre inversión pública y privada puede provocar una transformación tan profunda que el barrio se vuelve irreconocible para quienes lo habitaron por décadas.
Nómadas digitales: ¿modernos colonizadores?
Un elemento relativamente nuevo en la ecuación son los nómadas digitales, trabajadores remotos extranjeros que se mudan a ciudades del sur global atraídos por el bajo costo de vida (en dólares o euros) y la oferta cultural.
Según el estudio Gentrificación transnacional y nómadas digitales en la zona central de la Ciudad de México, publicado por la revista EURE, entre 2019 y 2023 este tipo de migración aceleró la gentrificación en la capital mexicana:
- Los precios de renta en colonias como Roma y Condesa se dispararon hasta un 50% en tres años.
- Muchos propietarios optaron por alquilar sus viviendas en plataformas como Airbnb, reduciendo la oferta para residentes locales.
- Se impusieron estilos de vida extranjeros: menús en inglés, precios dolarizados y negocios pensados para expatriados.
Mientras que para algunos esto significa cosmopolitismo, para otros es una forma de neocolonialismo que borra las tradiciones locales y exacerba la desigualdad.
Alternativas para mitigar el impacto de la gentrificación
Expertos proponen medidas para equilibrar los beneficios económicos de la gentrificación con la protección de las comunidades locales:
- Políticas de renta controlada que limiten los aumentos excesivos.
- Regulación de los alquileres de corto plazo (como Airbnb).
- Programas de mejoramiento de vivienda que permitan a los residentes originales quedarse en sus barrios.
- Fomento de la pequeña empresa mediante microcréditos y apoyo comunitario.
Además, una planeación urbana con enfoque social e incluyente podría priorizar el derecho a la vivienda sobre la especulación inmobiliaria.
💛💛💛