Un hombre con Parkinson vuelve a caminar gracias a una prótesis implantada en su  médula espinal, después de 25 años de no poder hacerlo. Aquí te lo contamos. 

Un hombre con Parkinson vuelve a caminar, según lo publicado en la revista científica Nature. Esta es la historia de Marc Gautier, un hombre francés de 62 años, que ha logrado volver a caminar tras recibir una prótesis de médula espinal. Gautier es el primer paciente tratado con esta nueva tecnología, que se espera pronto pueda ser utilizada en otros pacientes con la misma enfermedad. 

La prótesis fue creada por neurocientíficos del Universitario de Lausana en Suiza. Primero fue probada en primates y luego fue implantada en Marc Gautier, quien hace 26 años (cuando tenía 36 años) fue diagnosticado con Parkinson y empezó a tener problemas para caminar, subir escaleras y como él mismo ha declarado “se caía hasta casi cinco o seis veces al día”, por lo que tuvo que dejar de trabajar y optó por quedarse en su casa la mayor parte del tiempo. 

El entrenamiento antes de usar la prótesis

De acuerdo con la publicación, Gautier fue sometido a un periodo de entrenamiento de seis meses, en el que se adaptó al sistema dentro de un programa de rehabilitación en Lausana, tras ser seleccionado por no haber respondido a ninguno de los tratamientos contra la enfermedad de Parkinson. El hombre asegura que en un principio no estaba seguro de recibir el tratamiento porque implicaba demasiado trabajo, pero después de reflexionarlo aceptó.

Marc tuvo que reaprender a moverse y hoy puede ir a dar un paseo, salir de compras por su cuenta y hacer todo lo que él quiera, según asegura el hombre. Confiesa que actualmente utiliza su neuroprótesis unas ocho horas al día y solo la apaga cuando está sentado por mucho tiempo o se va a dormir. 

El Parkinson es una enfermedad asimétrica, según lo declarado por los neurocientíficos de Lausana

Los especialistas dicen que el Parkinson deja incapacitados a los enfermos para moverse y caminar. Sin embargo, esta enfermedad no impide que el cerebro envíe el mensaje de comunicación a la médula espinal para el movimiento de las piernas, pero sí lo debilita o lo altera. 

El Parkinson es una enfermedad asimétrica, que por lo general afecta a un solo lado del cuerpo. Con esta nueva técnica se puede estimular de manera selectiva la región más afectada y posibilitar nuevamente el movimiento, asegura el neuroingeniero español Eduardo Martín Moraud, responsable del proyecto. 

¿Cómo funciona esta neuroprótesis?

La neuroprótesis está compuesta por electrodos que se instalan encima de la médula espinal y se conectan de forma directa con un neuroestimulador en la zona subcutánea del abdomen, que es controlado desde el exterior mediante un mando a distancia, según lo declarado por los neurocientíficos. 

Jocelyn Bloch, doctora que formó parte de la investigación, expresó que el procedimiento es completamente personalizado, pues dentro de la intervención quirúrgica se debe probar el efecto de estimulación de los electrodos para poder ajustar su posición y potencia en el caso de cada paciente, de acuerdo a la respuesta de cada uno de sus músculos. 

El proyecto ha recibido el nombre de “Neurorestore” y se planea que pueda ser aplicado a más personas para demostrar su seguridad y eficacia en el tratamiento del Parkinson en fase avanzada. Actualmente, ya se está trabajando con un segundo paciente y se cuenta con otros seis candidatos que estarán participando en nuevos ensayos clínicos durante el 2024, los cuales serán financiados por la Fundación Michael Fox, creada por el actor Michael J. Fox, quien también sufre de la enfermedad.