Mientras múltiples personalidades del fútbol han reiterado su apoyo por Amir Nasr-Azadani, jugador iraní sentenciado a muerte, medios de ese país desmienten la noticia, pero “confirman” su participación en supuestos delitos contra la seguridad.

El 12 de diciembre de 2022, supimos de la supuesta noticia de que Amir Nasr-Azadani, jugador iraní, sería sentenciado a muerte por participar en las manifestaciones en favor de los derechos de las mujeres y las libertades básicas en su país, luego del asesinato de la joven Mahsa Amini, a manos de la Policía de la Moral tras ser acusada de no llevar el velo islámico correctamente puesto, el pasado 16 de septiembre.

Sin embargo, en días recientes, la Embajada del Gobierno iraní en Colombia y distintos medios iraníes adscritos al gobierno de ese país han desmentido la noticia y acusado una “campaña de mentiras provenientes desde occidente”. Estos medios argumentan que en realidad Amir Nasr-Azadani está acusado de rebelión armada y que el juicio aún no se ha llevado a cabo. 

En esta nota te diremos qué es lo que se sabe de Amir Nasr-Azadani, el “jugador iraní sentenciado a muerte”.

¿Quién es Amir Nasr-Azadani?

Según el sitio Transfer Markt, Amir Nasr-Azadani es un futbolista iraní de 26 años, nacido en la ciudad de Isfahan; aunque la Agencia de la República Islámica de Irán (IRNA) refiere que tiene 31 años. 

Según el sitio que guarda información de más de un millón de jugadores, Amir se desempeña en la posición de defensa, en la posición de lateral derecho, y representó a la selección sub 16 de fútbol de Irán. Su último club fue el Iranjavan FC de la League 2 de su país natal, con quien jugó hasta mayo de este año.

De acuerdo con el sitio, su carrera futbolística comenzó en el equipo Sepahan Sport Club de Isfahán, de la Iran Pro League o Copa del Golfo Pérsico, máxima categoría del fútbol profesional de Irán.

En 2014 formó parte del equipo de Teherán Rah-Ahan, uno de los clubes más antiguos de Irán, y para 2015 se unió al Tractorsazi Sports Club, de la ciudad de Tabriz, en el noroeste de Irán, donde estuvo hasta 2019. Posteriormente, pasó a formar parte del equipo Gol Reyhan Alborz y luego al Iranjavan FC.

De acuerdo con IRNA (agencia de noticias iraní) “debido a su estilo futbolístico y su invitación a la selección nacional juvenil de Irán, muchos imaginaron un futuro brillante para él”.

¿En verdad el jugador iraní fue sentenciado a muerte?

El pasado 12 de diciembre, la Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales (FIFPRO) dio a conocer que Amir Nasr-Azadanisería sentenciado a pena de muerte después “de hacer campaña por los derechos de las mujeres y las libertades básicas en su país”.

A partir de entonces, múltiples medios replicaron la noticia. Personajes del medio deportivo como el futbolista colombiano Radamel Falcao o los españoles Borja Iglesias y Marc Bartra, manifestaron su total rechazo ante la pena en contra de Nasr-Azadani. Por su parte, los hijos del fallecido ex futbolista Diego Maradona, utilizaron el Instagram de su padre para protestar contra la condena. Incluso, durante la final de la Copa del Mundo Qatar 2022, la cantante Shakira mandó un mensaje a través de redes sociales, en el que invitaba a los jugadores en el campo a solidarizarse con Amir. 

Y es que para nada parecía descabellada la noticia. De acuerdo con información de El País, las fuerzas policiales de Irán han detenido a más de 30 atletas acusados de graves delitos, por su participación en las protestas a raíz del asesinato de Mahsa Amini, a manos de la Policía de la Moral. 

Aunado a lo anterior, hasta el momento, el gobierno iraní ha sentenciado y ejecutado a dos personas tras participar en las manifestaciones. 

Sin embargo, el lunes 19 de diciembre, autoridades de ese país negaron que el jugador iraní tenga una sentencia de muerte por participar en las protestas antigubernamentales.

De acuerdo con la Agencia de Noticias de la República Islámica de Irán (IRNA), medio de comunicación adscrito al Ministerio de Cultura y Orientación Islámica de ese país, el presidente del Tribunal Supremo de la provincia de Isfahán, Asadolá Yafari, negó que el jugador tenga una condena de muerte por supuesto apoyo a favor de los derechos de las mujeres en Irán, “tal como lo alegan los medios extranjeros”. 

Según refiere la información de la IRNA, Amir Nasr-Azadani supuestamente pertenecería a un grupo armado, pero hasta el momento no se le ha dictado sentencia alguna. Recién el 19 de diciembre de 2022 se ha emitido su acusación.  

Ese mismo día, la Embajada de la república Islámica de Irán en Colombia anunció a través de redes sociales que la sentencia de muerte del futbolista se trataba de una noticia falsa, esto luego de que el presidente colombiano, Gustavo Petro, llamara al país de Irán a “no matar” a su futbolista.

De acuerdo con la IRNA, la noticia acerca de la supuesta condena a muerte de Amir Nasr Azadani, tiene el objetivo político de “influir en la opinión pública y buscar ejercer presión sobre el sistema judicial de Irán para evitar la aplicación de la justicia y el castigo correspondiente al delito” y que para ello se apoya de algunas “celebridades occidentales”

Sin embargo, fuera de IRNA y otros medios iraníes como HispanTV (canal de televisión por suscripción internacional de origen iraní​ dedicada a proporcionar información y entretenimiento en español) no se puede acceder a la evidencia que compruebe que la información es verídica.

Hasta ahora, el posicionamiento oficial “más visible” es el emitido por la embajada de Irán en Colombia. 

¿De qué se le acusa a Amir Nasr-Azadani?

Amir Nasr-Azadani es acusado de participar en la muerte de tres agentes iraníes, así como de pertenecer a una banda ilegal con la intención de perturbar la seguridad del país y complicidad en delitos contra la seguridad, de acuerdo con la información de la IRNA. 

Esta información la pudo corroborar el Servicio Persa de la British Broadcasting Corporation (BBC). Del mismo modo, la BBC confirmó que Amir permanece bajo custodia desde el 18 de noviembre.

Esta falta es conocida como la pena de Moharebeh, es decir, quitar la vida y dañar a las propiedades de los ciudadanos. Para el gobierno iraní la pena por cometer Moharebeh es la ejecución. 

De acuerdo con el artículo 279 del Código Penal Islámico, Moharebeh puede significar desenvainar un arma con la intención de atentar contra la vida, la propiedad o el honor de alguien, ya sea para intimidar o provocar inseguridad en el entorno. 

En otras palabras, a pesar de que el gobierno iraní no haya sentenciado a muerte a Amir Nasr-Azadani, según la ley islámica aplicada en Irán, es muy probable que sí lo sea pronto. 

De acuerdo con la organización Amnistía Internacional, actualmente al menos 26 personas “corren grave peligro de ser ejecutadas en relación con las protestas nacionales, después de que las autoridades iraníes ejecutaran arbitrariamente a dos personas tras juicios manifiestamente injustos en un intento de infundir miedo entre la población y poner fin a las protestas”.

De esas 26 personas, al menos 11 están condenadas a muerte y 15 están acusadas de delitos que pueden ser sancionados con la pena de muerte. 

La represión de la policía y cuerpos paramilitares del régimen iraní hacia los manifestantes ha dejado unas 300 muertes. 

Las dos personas ejecutadas por pena de muerte son Mohsen Shekari y Majid Reza Rahnavard, de 23 años. Ambos fueron ahorcados por haber participado en “crímenes de guerra”, pero en realidad, los jóvenes habían bloqueado calles y amenazado a los cuerpos de seguridad.