El juicio del caso Gisèle Pelicot podría ser suspendido temporalmente por la enfermedad de su esposo y abusador: convocan marchas de feministas francesas para apoyarla. 

El caso Gisèle Pelicot ha removido las entrañas de la violencia sexual cometida hacia las mujeres por parte de sus familiares y personas de confianza en todo el mundo, pero podrían existir más víctimas y una de ellas es su propia hija. Gisèle fue drogada por su esposo durante casi una década para que más de 72 hombres abusaran sexualmente de ella. Al día de hoy, enfrenta un juicio contra 51 de sus abusadores, pero el proceso está en riesgo de suspenderse y ser postergado por el estado de salud del principal criminal, su esposo Dominique Pelicot. 

De acuerdo con el diario francés Le Monde, el jueves 12 de septiembre se suspendió el juicio del caso de Gisèle Pelicot, bajo las indicaciones del juez del tribunal penal de Vaucluse, Roger Arata. Esta suspensión estará vigente hasta el día lunes 16 de septiembre, a la espera del regreso de Dominique Pelicot, el principal acusado por sumisión química y violación. 

Suspenden el juicio de Giséle porque su abusador Dominique Pelicot está enfermo 

Dominique Pelicot, un jubilado de 71 años, se reportó como enfermo desde ese mismo lunes y quedó exento de asistir a las audiencias. Según las declaraciones del magistrado, si su estado de salud resulta “prolongadamente indisponible”, el caso podría ser aplazado. 

Esta suspensión total del caso Gisèle Pelicot, que comenzó el 2 de septiembre y estaba previsto que terminaría en diciembre de 2024, podría causar que las sesiones se reprogramen y termine en una fecha posterior.

Sin embargo, Gisèle podría no ser la única víctima. De acuerdo con el medio internacional Independient, la hija de los Pelicot (bajo el pseudónimo de Caroline Darian) presentó una serie de fotografías de su cuerpo desnudo tomadas por su padre. Caroline estaba dormida en las imágenes, mismas que estaban guardadas en una carpeta con el nombre “Cerca de mi hija desnuda”.

Además, en el Tribunal Penal del departamento francés de Vaucluse se reveló que también había carpetas con fotografías “despectivas y humillantes” de las dos cuñadas del acusado mientras se bañaban. 

Ante las declaraciones del magistrado y la suspensión del juicio, grupos feministas de diversas entidades de Francia convocaron marchas para apoyar a Gisèle y a las mujeres presuntamente afectadas. Para el sábado 14 de septiembre, se prevén decenas de manifestaciones bajo la consigna de que “la vergüenza cambie de lado”.

La legislación francesa no reconoce el caso de Gisèle Pelicot como violación

Pero, ¿qué se está buscando en el caso Gisèle Pelicot? La mujer francesa de 72 años fue sometida a múltiples violaciones con la complicidad de su marido Dominique, que la ofrecía como objeto sexual en una página de internet.

De acuerdo con la legislación francesa, la sumisión química no se considera como un agravante en el proceso judicial. Esto significa que el código penal de Francia establece que cualquier acto sin violencia, coacción o amenaza se clasifica como abuso, pero no como violación. 

• La pena máxima por abuso sexual en Francia es de 7 años. 
• Mientras tanto, la pena por violación es de 20 años. 

¿Y cuál es el problema de esto? Los agresores de Pelicot sostienen que creyeron que Gisèle había dado su “consentimiento para ser penetrada” y asumieron que, al estar su marido presente, ella estaba al tanto de lo que sucedía en la habitación. Algunos incluso afirman haber notado lubricación en las partes íntimas de la víctima y lo interpretaron como “una señal de consentimiento”. 

Sin embargo, según la traducción de “La voz de Galicia” en la sesión, los expertos presentes en el juicio aseguraron que “el cuerpo humano reacciona mecánicamente ante el frotamiento”, por lo que no puede deducirse que eso sea consentimiento en ninguna de sus formas. 

Asimismo, de los 50 hombres que han testificado sobre las violaciones, solamente tres buscadores han admitido lo que hicieron y se disculparon ante Gisèle. No obstante, estos agresores sostienen que lo que ocurrió fue un “juego sexual consensuado” y alegan no haber sabido que la mujer había sido drogada sin su consentimiento.

Sin la definición clara del consentimiento, los violadores podrían enfrentar una pena por abuso sexual y no por la violación de Gisèle. Esto porque los abogados de los acusados argumentan que sus clientes no eran conscientes de que la víctima estaba inconsciente y que no sabían que estaban cometiendo un abuso sexual. 

“En Francia, es necesario probar la intención culpable; si el autor no sabía lo que hacía, no se considera violación”, dijo uno de los abogados.

Mujeres se manifiestan en Francia para apoyar a Gisèle

Hasta el momento, Dominique Pelicot no ha hecho declaraciones en juicio sobre las violaciones a su esposa, la sumisión química ni las presuntas fotografías que vulneran a su propia hoja y sus cuñadas. Además, su testificación será postergada hasta que le retiren la licencia por enfermedad. 

Pero si Gisele alzó la voz y mostró su rostro para cambiar “la vergüenza de lado”, las mujeres francesas tampoco guardarán silencio. De acuerdo con el medio francés BFM, distintas colectivas feministas han organizado manifestaciones para el sábado 14 de septiembre, entre ellas “NousToutes” y la “Fondation des Femmes”.