Justicia para Toñito es la exigencia que resuena en el municipio de Tenango del Valle, donde la comunidad de San Pedro Zictepec llora la muerte de Antonio Juda Vidal, un niño de nueve años que fue encontrado sin vida el 20 de marzo, un día después de haber desaparecido.

En la tranquila comunidad de San Pedro Zictepec, en Tenango del Valle, el grito de “¡Justicia para Toñito!” resonó con fuerza mientras los vecinos y familiares del pequeño Antonio Juda Vidal Jaime, conocido como Toñito, acompañaban su ataúd blanco hacia el panteón local.

El niño de nueve años fue asesinado tras una desaparición que conmocionó a toda la comunidad. Con globos blancos y flores, amigos y compañeros de escuela del menor le brindaron su último adiós, recordando su risa, sus travesuras y su amor por el fútbol.

La tragedia comenzó el 19 de marzo, cuando Toñito salió de su casa acompañado de un amigo para ir a jugar maquinitas en una casa cercana, pero no regresó. Durante el día siguiente, la angustia se apoderó de su familia, y vecinos de la comunidad se organizaron para realizar búsquedas intensivas. Sin embargo, lo que nadie imaginaba era que el presunto responsable de la desaparición y muerte del niño sería Mario “N”, un vecino de la familia.

Cronología del homicidio de Toñito: “El enemigo estaba en casa”

Los vecinos de San Pedro Zictepec, al enterarse de la detención de Mario “N” como presunto homicida, no ocultaron su sorpresa y enojo. “El enemigo estaba en casa”, comentaron, pues el hombre participó en las brigadas de búsqueda del niño, sin mostrar nunca sospecha alguna ni pronunciar palabra alguna mientras caminaba junto a los demás en los senderos de la localidad. Sin saberlo, caminaba entre quienes buscaban al niño al mismo tiempo que, en su casa, escondía su cuerpo sin vida. Esta es la cronología de los hechos:

• 19 de marzo de 2025: Toñito, de nueve años, sale de su casa acompañado de un amigo para jugar maquinitas en una vivienda cercana, pero no regresa. Inicia la búsqueda por parte de familiares y vecinos.
• 20 de marzo de 2025: Vecinos y autoridades locales participan en brigadas de búsqueda, sin encontrar pistas. Mario “N”, vecino de la familia, se une a las búsquedas, pero no interactúa con los demás participantes.
  • Mario “N” se muestra nervioso durante un operativo de inspección en su hogar. Al acceder a su vivienda, las autoridades encuentran a Toñito sin vida dentro de un tinaco de agua. Mario “N” es detenido y confiesa que mató al niño porque “no le caía bien”.

El macabro hallazgo ocurrió cuando, después de varias horas de inspección en la comunidad, los elementos de seguridad encontraron a Mario “N” actuando de manera sospechosa. Al realizarle una revisión preventiva, encontraron en su posesión un cuchillo y un teléfono celular. Tras este hallazgo, las autoridades solicitaron acceso a su hogar, donde finalmente encontraron a Toñito dentro de un tinaco de agua. Al ser interrogado, Mario “N” confesó que el niño no le caía bien, lo que fue el motivo detrás del asesinato.

La comunidad, indignada, exige justicia para Toñito

El caso, que rápidamente se viralizó en las redes sociales, ha generado una ola de indignación en el municipio. Vecinos, familiares y compañeros de Toñito no han cesado en exigir justicia para el menor. En su escuela, sus amigos lo recordaron por su amor al fútbol, sus travesuras y su gran vínculo con su abuelita, quien, según mencionaron sus seres cercanos, será quien más lo extrañe.

Durante su despedida, la comunidad de San Pedro Zictepec demostró su pesar y apoyo a la familia del niño, participando en una emotiva caravana de globos blancos que acompañó el ataúd del menor hasta su última morada. El cielo se llenó de globos en señal de esperanza, mientras todos los presentes no dejaban de gritar: “¡Justicia para Toñito!”. La tristeza fue palpable, pero también lo fue el compromiso de la comunidad de no dejar que este crimen quedara impune.

¿Qué pasará con Mario “N”?

Mario “N”, el presunto responsable, fue detenido y llevado al Ministerio Público, donde se definirá su situación legal. Sin embargo, el proceso judicial se enfrenta a un contexto de dolor colectivo, ya que la falta de justicia y la vulnerabilidad de los menores frente a agresores cercanos genera desconfianza y desesperanza en los habitantes de Zictepec.

Pero, ¿qué condena podría enfrentar Mario “N”? En el Estado de México, las penas por homicidio están reguladas en el Artículo 242 del Código Penal local. Para el homicidio simple, es decir, cuando se comete sin las circunstancias agravantes que lo califiquen, la pena es de 10 a 15 años de prisión y una multa de de 250 a 375 días.

En el caso de un homicidio calificado (cuando el crimen es cometido con agravantes como premeditación, alevosía o ensañamiento) la pena es mucho más severa, con una condena de 40 a 70 años de prisión o incluso prisión vitalicia, además de una multa que va de 700 a 5,000 días. Estas sanciones buscan castigar con mayor dureza los homicidios cometidos bajo circunstancias que reflejan una mayor gravedad del delito.

Las autoridades locales han reiterado su compromiso con la justicia, pero también han hecho un llamado a la comunidad para mantener la calma y evitar actos de justicia por mano propia. La Fiscalía General de Justicia del Estado de México continúa con las investigaciones, mientras que los pobladores siguen luchando por obtener respuestas y, lo más importante, justicia para Toñito.