En los últimos meses han sido reportados al menos seis casos de intoxicaciones masivas en escuelas en Chiapas, Veracruz, Hidalgo y Tlaxcala.
Las alertas se han encendido después de los siete casos de intoxicación masiva en escuelas de diferentes estados de la República. Más de 200 niños y adolescentes han resultado afectados en Chiapas, Hidalgo, Tlaxcala y Veracruz en menos de 3 meses.
Desmayos, vómito, mareo, dolor de cabeza y adormecimiento de las extremidades son algunos de los síntomas que han registrado los menores afectados por estas intoxicaciones masivas.
Desafortunadamente, ni los padres ni las autoridades educativas de las instituciones donde sucedieron los incidentes, han sabido dar respuesta sobre qué es lo que ha provocado la ola de intoxicaciones entre estudiantes de secundaria y preparatoria.
Todo comenzó el 23 de septiembre, en la Escuela Secundaria Federal 1 del municipio de Tapachula, Chiapas se reportó que 30 estudiantes de entre 13 y 14 años comenzaron a presentar vómito, dolor abdominal y adormecimiento de las extremidades. Las primeras versiones señalaron a una fuga de gas de un tanque estacionario.
Posteriormente el 6 de octubre, nuevamente en Tapachula, 10 estudiantes de la Telesecundaria número 388 “Ricardo Flores Magón”, tuvieron que ser atendidos por el consumo de agua contaminada por sustancias desconocidas.
El 7 de octubre la gravedad de los casos escaló en la escuela Juana de Asbaje ubicada en Bochil, Chiapas, donde 110 alumnos sufrieron de desmayos, vómitos y mareos a mitad del patio de la escuela, todo producto de una intoxicación masiva provocada, según las autoridades chiapanecas, por el consumo de alimentos y bebidas contaminados.
El 11 de octubre la historia se volvió a repetir en la Escuela Secundaria Federal 1 de Tapachula nuevamente, donde más de 20 estudiantes sufrieron intoxicación con las mismas características, y ahora las versiones apuntaban a alimentos contaminados con una sustancia desconocida hasta el momento por las autoridades.
Casos fuera de Chiapas
Los casos de intoxicación comenzaron a verse en más partes de México, comenzando por Tlaxcala, el 14 de octubre. Después de consumir café, un grupo de al menos 6 estudiantes del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado (CECyTE) de la localidad de San Tadeo Huiloapan, presentó el cuadro de síntomas que se ha visto en los casos anteriores.
En el municipio de Álamo Temapache, del estado de Veracruz, 36 alumnos de la Secundaria Técnica número 67 presentaron desmayos, vómitos, arritmias, dolor de cabeza y dolor abdominal intenso durante su receso, los hechos se dieron el 18 de octubre.
Y tan solo 3 días después, Hidalgo fue el segundo estado afectado por la intoxicación de 25 alumnos del Colegio de Bachilleres del Estado de Hidalgo (Cobaeh), plantel Mecatlán, del municipio de Huejutla. Las y los afectados presentaron el mismo cuadro de síntomas que en casos anteriores después de su receso: vómito, mareo y desmayos.
En total, más de 200 niños y adolescentes han sido afectados por esta ola de intoxicaciones en las escuelas, de la que padres y madres de familia han especulado más de una vez que se trata de intoxicación por drogas.
Todos los infantes afectados han sido atendidos a tiempo por lo que no se han reportado fallecimientos, sin embargo, un menor en Bochil estuvo en coma durante 5 días y en su momento fue el único caso de gravedad.
¿Qué dicen las autoridades?
La secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, presentó el informe de las pruebas toxicológicas aplicadas a los estudiantes afectados de Chiapas, Veracruz e Hidalgo durante la conferencia mañanera del 8 de noviembre.
En él, se descartó que la intoxicación de los menores fuera causada por sustancias ilícitas como metanfetaminas, marihuana, cocaína, opiáceos u otras sustancias como solventes, arsénico, cianuro o fosfuros.
Únicamente tres de las más de 140 pruebas realizadas a las y los afectados arrojaron entre los resultados el consumo de benzodiacepinas (medicamentos psicotrópicos con efectos calmantes), y un caso de concentraciones altas de acetona.
Sin embargo, la secretaria afirmó que no se trata de una intoxicación masiva por drogas, sino de casos por intoxicación por alimentos, bebidas en mal estado o con sustancias nocivas que se siguen investigando en conjunto con las respectivas autoridades estatales.
“Se mantiene comunicación con padres de familia y maestros a fin de brindar una atención integral a la problemática que se presentó en los centros escolares”, dijo Icela Rodríguez.
Igualmente, afirmó que las líneas de investigación continúan abiertas, por lo que no se sabe qué pudo haber intoxicado a las y los menores. Ante esto, la secretaria dijo que se sigue en contacto con las y los afectados, sus familiares, y las autoridades estatales de cada caso para dar resolución al tema.
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