Desde los tres años, Adhara dominaba la tabla periódica y tenía conocimientos avanzados de álgebra. Ahora tiene 11 años, ha estudiado dos carreras y cursa una maestría. Posee un coeficiente intelectual de 162, superior al de Einstein.
Adhara Pérez es una niña genio mexicana, originaria de Veracruz. Desde muy pequeña radica con su familia en la Ciudad de México. Su sueño es trabajar en la NASA y pisar la luna y, ¿por qué no?, algún día también Marte.
Adhara Maite Pérez Sánchez cuenta con un coeficiente intelectual (IQ por sus siglas en inglés) de 162, dos cifras por encima del físico Albert Einstein.
Actualmente Adhara tiene 11 años, ha estudiado dos carreras –una en Ingeniería en Sistemas en la Universidad Tecnológica de México y otra en Matemáticas, en la universidad virtual CNCI– y se encuentra cursando actualmente la maestría en Ciencias en Ingeniería Mecánica en el Instituto Politécnico Nacional.Junto con Michelle Arellano, la niña que fue admitida en la Universidad de Massachusetts para estudiar medicina, y Dafne Almazán, la niña genio que se tituló en psicología a los 13 años, Adhara forma parte del 3 por ciento de la población infantil que tiene superdotación intelectual: niños genio que se caracterizan por tener un coeficiente intelectual superior a 130.
Cómo se descubre a una niña genio
Adhara era molestada por sus compañeros de la primaria, quienes la llamaban “rara”, según contó Nallely Sánchez, madre de la niña genio, al medio Milenio.
Sus maestros decían que no se esforzaba en la escuela y que se quedaba dormida. Incluso, cuenta la madre de Adhara, llegaron a mencionarle que “no tenía mucho futuro”.
Pero Nallely sabía que Adhara tenía cualidades especiales, ya que desde muy temprana edad conocía perfectamente la tabla periódica y tenía conocimientos avanzados de álgebra.
Cuando Adhara tenía tres años su madre decidió llevarla a terapia. Allí los médicos diagnosticaron a Adhara con “autismo con un IQ muy avanzado”. En concreto, le dijeron que tenía síndrome de Asperger.
Según la Autism Society, las personas con Asperger suelen tener un cociente intelectual superior al promedio. Incluso algunos expertos han especulado acerca de que científicos con coeficientes intelectuales por encima de la media como el mismo Albert Einstein, así como filósofos, artistas y músicos destacados, mostraron rasgos asociados a este síndrome.
Por estas razones, a Adhara y a su familia les recomendaron acudir al Centro de Atención al Talento (CEDAT), organismo para niños sobredotados, cuya finalidad es impulsar mejores condiciones para niños que tienen mayor capacidad intelectual, y que, como Adhara, en ocasiones sufren discriminación educativa y social.
En el instituto los expertos confirmaron que era una niña superdotada, pues Adhara obtuvo la sorprendente puntuación de 162 en el test de IQ.
De acuerdo con la Escala Wechsler de Inteligencia para Niños (WISC), la cual mide la inteligencia en niños desde los 6 hasta los 16 años, las puntuaciones de coeficiente intelectual (IQ) se dividen de la siguiente manera:
- Menos de 70 puntos: Muy bajo.
- Entre 70 y 79 puntos: Límite.
- Puntuaciones entre 80 y 89 puntos: Normal bajo.
- Entre 90 y 109 puntos: Medio.
- CI de entre 110 y 119 puntos: Normal alto.
- Puntuaciones entre 120 y 129 puntos: Superior.
- Puntuaciones de más de 130 puntos: Muy superior al promedio.
Así fue que Adhara comenzó a estudiar en las aulas del CEDAT. No obstante, los precios que la familia pagaba eran muy elevados, por lo que cada vez se volvió más complicado que Adhara continuara con su formación en el instituto.
Completó entonces sus estudios de manera presencial en escuelas tradicionales, pero lo hizo mediante la aceleración de grado en la Secretaría de Educación Pública (SEP), modelo de intervención educativa que permite que los alumnos con aptitudes sobresalientes puedan moverse a través del currículo a un ritmo más rápido de lo que se establece en el modelo educativo nacional.
Fue entonces que Adhara Pérez, niña genio, terminó la primaria a los cinco años. Cuando tenía seis años y medio, terminó la secundaria. Y el bachillerato lo cursó en un año en el Instituto Tecnológico de Tláhuac.
Pasión por el espacio
Según relata Nallely Sánchez a la agencia de noticias Infobae, desde antes de que sus padres la llevaran al CEDAT, los maestros decían que su hija se la pasaba haciendo rayones en espiral. Eran agujeros negros, cuenta Adhara.
Han pasado 8 años desde entonces, y la fascinación de Adhara Pérez por el espacio y sus componentes se encuentra intacta.
En agosto de 2022, la Agencia Espacial Mexicana (AEM), organismo descentralizado de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), invitó a Adhara a dar una conferencia en el próximo Congreso Nacional de Actividades Espaciales (CONACES 2022). Dicho evento contará con la presencia de la NASA como invitado especial.
A su vez, continúa preparándose en el Instituto Politécnico Nacional, donde cursa la maestría en Ingeniería Mecánica, orientada en el desarrollo e innovación tecnológica para la solución de problemas donde realiza investigaciones enfocadas en daños estructurales y ciencia nuclear.
Dentro de poco, cuando cumpla 12 años, Adhara tendrá la preparación necesaria para incorporarse a un programa de co-tutela doctoral en colaboración con instituciones educativas de Francia, mismo que le permitirá aplicar sus conocimientos en seguridad estructural de naves espaciales.
Su sueño, según ha comentado Adhara en múltiples ocasiones a diferentes medios, es ser astronauta y pisar la Luna; así como, en un futuro no muy lejano, llegar al planeta MarteEn 2019, Adhara Pérez niña genio, fue elegida por la revista Forbes como una de las 100 mujeres más poderosas de México.
QUE TRISTE QUE SE TENGAN QUE IR AL EXTRANJERO ESTÁS PERSONITAS SUPERDOTADAS, FUGA DE CEREBROS, LAMENTABLE..
¡¡Felicidades!!, pequeña Adhara sigue adelante con tu sueño de trabajar en la NASA, TÚ PUEDES Y SÉ QUE LO LOGRARÁS.