La reforma para la igualdad salarial de las futbolistas mexicanas fue aprobada por el Senado de la República para establecer un salario base para todas las personas que se dediquen de manera profesional a un deporte. Aquí te decimos todo lo que necesitas saber al respecto.
Con la reforma para la igualdad salarial de las futbolistas mexicanas que fue aprobada en el Senado este 15 de noviembre, sería determinado un salario base para todas las personas que desempeñen un deporte de manera profesional en el país.
Esta iniciativa busca combatir la desigualdad entre hombres y mujeres en el deporte, así como combatir el acoso y la violencia que viven las deportistas. Según la senadora, Patricia Mercado, el salario base tendrá que ser igual para hombres y mujeres y las autoridades tendrán 180 días para establecerlo.
La iniciativa aún debe ser turnada a la Cámara de Diputados. Mientras tanto, estos son tres puntos clave para entenderla.
¿Por qué es necesaria la reforma para la igualdad salarial en el deporte en México?
Esta iniciativa no solo busca cambiar las condiciones laborales de las y los futbolistas, también modificaría los contratos de jugadores de baseball, frontón, box, luchadores y cualquier persona que se desempeñe de manera profesional en un deporte que sea parte de una federación nacional.
El caso del fútbol es quizá el más mediático, debido al interés que existe en el país por este deporte. Y por esta razón también existe información sobre las condiciones laborales de las personas que han elegido dedicarse de tiempo completo a esa actividad.
Por ejemplo, en México un hombre gana en ocho horas el sueldo mensual de una mujer futbolista. Esto significa que una mujer tendría que trabajar durante siete años y medio para igualar el salario mensual de un hombre.
Datos proporcionados por los clubes de fútbol mexicanos a la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) muestran que los equipos femeniles en el país tienen un promedio de ingresos de cinco millones 415 mil pesos anuales. Sin embargo, solo destinan el 43 por ciento de sus recursos (2.3 millones de pesos) a los salarios de las jugadoras.
De esta manera, el salario mensual promedio de las mujeres futbolistas mexicanas es de siete mil 400 pesos. Al recibir salarios tan bajos, muchas de las mujeres deportistas que se encuentran persiguiendo su sueño deben tener otro trabajo que les ayude a cubrir gastos como la renta de un lugar para vivir, su comida y el transporte para poder llegar a los entrenamientos.
Por medio de la reforma se busca hacerle frente a este tipo de desigualdades, tras garantizar y ejecutar políticas públicas deportivas que permitan el acceso y la práctica igualitaria del deporte a mujeres y hombres.
¿En qué consiste la iniciativa para la igualdad salarial de las futbolistas mexicanas?
Si esta iniciativa es aprobada por el Poder Legislativo, la Ley Federal del Trabajo deberá ser modificada, para establecer los siguientes derechos básicos de las Personas Deportistas Profesionales en el país.
- Equidad salarial. Las federaciones deberán establecer un salario base equivalente para las ramas varonil y femenil.
- Promover el deporte con perspectiva de género. Los patrones estarán obligados a mantener un servicio médico con perspectiva de género e impedir actos de violencia laboral, discriminación y acoso sexual.
- No discriminación por motivo de maternidad. Por ningún motivo el embarazo será considerado como accidente de trabajo o lesión.
- Acceso igualitario a oportunidades. Deberá ser garantizada la paridad no solo de salarios, sino de gastos por desempeño, igualando las primas, bonos o análogos, la misma cobertura mediática y presupuesto para la comunicación de los eventos, torneos y partidos de las ramas varonil y femenil. Y el mismo nivel de calidad en la capacitación, entrenamiento, nutrición y servicio médico.
¿Por qué la Liga MX Femenil está en desacuerdo?
Mariana Gutiérrez, la presidenta de la Liga MX Femenil, se manifestó en contra de esta iniciativa por medio de una carta dirigida a las y los senadores en la que asegura que por ahora no es viable un aumento salarial, ya que podría poner en riesgo la organización de la Copa del Mundo de 2026 y la propuesta del Mundial Femenil en 2027. Al mismo tiempo, un aumento salarial afectaría a la Federación Mexicana de Futbol, pues sus gastos podrían crecer en 43 por ciento, lo cual la volvería inviable y acabaría con el sueño de todas las mujeres futbolistas. En la carta, la presidenta le solicitó a los senadores no votar el dictamen hasta tener un parlamento abierto con las jugadoras, pero el dictamen fue aprobado.
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