Este año investigamos cómo y por qué existe la brecha de género en el fútbol, de qué manera es concesionada el agua en México y cómo la pandemia de COVID-19 afectó a personas con enfermedades crónicas. Narramos cronologías de casos dolorosos como los feminicidios de Debanhi y Ariadna, y los asesinatos de los hermanos Tirado. Y sí, continuamos abriendo, analizando y visualizando datos sobre COVID.

Las historias de 2022 en Serendipia fueron tan variadas como empezar el año dando consejos sobre cómo superar la cuesta de enero y terminar investigando por qué no hay todavía un Sistema Nacional de Cuidados en México. Este año publicamos 351 notas y reportajes en nuestro sitio web y 197 videos en nuestro canal de YouTube. 

Además, desarrollamos el proyecto “Víctimas Paralelas” con PODER Latam. A lo largo de 11 investigaciones, exploramos qué sucedió con las personas con enfermedades crónicas durante la emergencia sanitaria por COVID-19 y cómo el sistema de salud público en el país atendió (o no) a estos pacientes. 

Detrás de cada publicación de Serendipia hay un equipo multidisciplinario (periodistas, diseñadora, community manager, editor de video, analista y visualizador de datos) que hace posible encontrar los patrones en una base de datos, rastrear las historias en esa cifras, presentarlas en un texto y representarlas en una -o varias- ilustraciones y visualizaciones de datos. 

Este año, ha sido uno de los más tristes para la prensa en México. Nuestro país es el segundo con más asesinatos de periodistas a nivel mundial, solo detrás de Ucrania, en donde hay un conflicto armado en desarrollo. Y hasta agosto habían sido reportados 15 asesinatos de personas comunicadoras a nivel nacional: casi dos por mes.

En este contexto, terminamos el 2022 y recibimos al 2023 convencidas de que en México (contrario a lo que afirma el presidente Andrés Manuel López Obrador) no hay libertad de prensa, pero decididas a seguir aportando nuestro granito de arena desde los datos y el acceso a la información pública para darles a ustedes, nuestras lectoras, información útil e imparcial.

A continuación, una selección de las historias que marcaron nuestro año. 

Del gasto en la Alerta de Género a los feminicidios de Debanhi y Ariadna

La violencia contra las mujeres no para. Hasta noviembre de este año han sido registrados 858 feminicidios, de acuerdo con el reporte más reciente del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). Esto quiere decir que, en promedio, dos mujeres fueron víctimas de feminicidio cada día. Y eso sin contar el subregistro de todos aquellos asesinatos dolosos de mujeres que las fiscalías estatales no investigan con perspectiva de género y por lo tanto no catalogan como feminicidios. 

Este año los casos de Debanhi, Ariadna, Lidia Gabriela, Nayeli, Brenda (de cuatro años), Luz Raquel y Mónica Citlalli llegaron a los medios de comunicación, pero hubo 850 más de los que no conocemos los detalles. 

A un mes de cerrar el año, 858 mujeres han sido asesinadas por razones de género en México, un país en donde 23 de las 32 entidades federativas tienen al menos una Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM) activa. Este mecanismo es un conjunto de acciones gubernamentales de emergencia encaminadas a enfrentar y erradicar la violencia de género en un territorio determinado.

La primera AVGM fue activada en el Estado de México en 2015 y, siete años después, 22 entidades han activado el mecanismo, pero las mujeres siguen siendo asesinadas por razones de género en todos esos lugares. 

Por eso en Serendipia año con año intentamos responder una pregunta: ¿cuánto y en qué gastan las entidades con AVGM activa? Para la entrega de este año dirigimos 852 solicitudes de acceso a la información pública a las 23 entidades. Después sistematizamos y analizamos los datos que nos entregó cada gobierno estatal y municipal, así como las dependencias locales encargadas de atender esta medida de emergencia. 

En esta investigación encontramos que en Chiapas los recursos han sido destinados a medidas de prevención. Sin embargo, colectivos feministas denuncian su escasa efectividad, así como la poca atención que reciben mujeres indígenas y migrantes en el estado. En Durango, por otro lado, el 74 por ciento del gasto ha sido destinado a la compra de vehículos de los que no se reporta qué uso les fue asignado. 

Además, por tercera vez consecutiva la Fiscalía de Morelos (entidad en donde fue encontrado el cuerpo de Ariadna) se negó a entregar esa información, alegando que atender la AVGM no es un asunto de su competencia. 

Con esta información creamos el micrositio “México, date cuenta”, en donde es posible consultar y descargar la información sobre el gasto en la AVGM. Este proyecto tiene la intención de darle a la ciudadanía, las organizaciones de la sociedad civil y los gobierno la información para crear mejores políticas públicas y así, en 2023 no publicar ninguna cronología de un feminicidio. 

El fútbol es cosa de hombres. Pero, ¿por qué?

El fútbol, uno de los deportes más vistos en México y el mundo, todavía no es cosa de mujeres. Y no es que hagan falta jugadoras, árbitras o afición. Es el machismo. 

Una mujer futbolista que pertenece a un equipo mexicano de primera división percibe, en promedio, siete mil 463 pesos mensuales, mientras que el salario promedio mensual de los hombres es de 666 mil 946 pesos, de acuerdo con datos de Salary Sport y del informe “Marcando el ritmo: Informe de evaluación comparativa del fútbol femenino” de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), actualizados a 2021. 

En la investigación que publicamos en octubre encontramos que la brecha de género sigue existiendo en el fútbol y se debe principalmente al poco interés de los clubes en mejorar las condiciones en las que trabajan las mujeres futbolistas. Y es que en 2019, México fue el segundo país con mayor público en un partido de fútbol femenil: 41 mil 600 personas asistieron  a la final de Tigres contra Rayadas de Monterrey. En primer lugar estuvo España con 60 mil 739 personas en un partido. 

No obstante, los clubes femeniles solo destinan el 43 por ciento de sus recursos a los salarios de las jugadoras, mientras que los varoniles gastan casi todo su presupuesto en pagarles a los hombres que juegan para ellos. 

Concesiones de agua: ¿quién las da, por qué y a quién?

En México el agua (como cualquier otro bien) es vendida al mejor postor. Aunque el acceso al agua es un derecho humano, el gobierno federal ha concesionado 237 mil millones de metros cúbicos de este recurso a empresas y personas. 

Esto, en un contexto en el que 40 por ciento del país enfrenta algún grado de escasez de agua, refleja las prioridades del gobierno. Y es que aunque en agosto pasado el presidente Andrés Manuel López Obrador propuso prohibir las empresas cerveceras en el norte del país (por la crisis de escasez de agua en esa región) y llevarlas al sur, la realidad es que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha otorgado concesiones durante años sin ser capaz de medir que las personas y empresas concesionarias solo exploten el volumen que tienen permitido. Y, por supuesto, sin sancionar a quienes sobre explotan este recurso.  

Las otras víctimas de la pandemia

Desde 2021, después del primer año de la pandemia de COVID-19, hemos escuchado el término “exceso de mortalidad” con frecuencia. Se refiere a aquellas muertes que las autoridades de salud en el país no esperaban: los fallecimientos que superan los cálculos, las tendencias que mostraban enfermedades como el cáncer, la diabetes y los padecimientos cardiovasculares.

Es decir, mientras el país enfrentaba una pandemia, murieron más personas por enfermedades crónicas de las que se tenía proyectado. ¿La saturación de hospitales y del sistema de salud público en general tuvo algo que ver con eso? Esta fue la pregunta a partir de la que surgió el proyecto Víctimas Paralelas, desarrollado a lo largo del año con PODER Latam. 

Los datos son claros: en 2020 hubo menos de la mitad de las consultas que se realizaron en 2019, según datos del Sistema de Información de la Secretaría de Salud (Sinaiscap). En muchos casos los pacientes que entrevistamos para cada una de las 11 entregas del proyecto tuvieron que postergar cirugías y esto se tradujo en fallecimientos. En otros más, la falta de medicamentos significó un retroceso en una larga lucha para combatir una enfermedad crónica como el cáncer o la diabetes. A la par, el exceso de mortalidad registrado llegó hasta 45 por ciento en el caso de padecimientos cardiovasculares, seguidos por las enfermedades respiratorias con 44 por ciento y la diabetes con 42 por ciento. 

Ellas y ellos son las víctimas de la falta de previsión de las autoridades sanitarias en México, quienes a pesar de tener conocimiento de la pandemia desde diciembre de 2019, decidieron no actuar y dejar a pacientes con enfermedades crónicas a su suerte. Ellas y ellos son las víctimas paralelas de la pandemia. 

El fin de la pandemia (no) llegó este año

Y aunque para muchas personas la pandemia ya terminó (sí, a nosotras también nos gustaría creer eso), este año seguimos publicando investigaciones y tutoriales sobre COVID. 

Publicamos desde tutoriales sobre cómo tramitar y corregir el certificado de vacunación y por qué este no incluye la tercera dosis, hasta una investigación sobre las ocupaciones con mayor tasa de letalidad de esta enfermedad.

Para esta última debimos volver a solicitarle la información a la Secretaría de Salud (SSa) porque las variables de ocupación, síntomas y estatus de vacunación en personas con COVID-19 en el país no son públicas. Pero después de esperar un mes, pagar 30 pesos y esperar otros mes a que un disco compacto llegara por correo (correo postal, no electrónico), obtuvimos la base de datos. 

(Por cierto, este año también pagamos mil pesos por OTRA información pública que al final ni siquiera sirvió y pudimos haber consultado en internet de manera gratuita, pero la Secretaría de Bienestar nos quiso cobrar. AQUÍ puedes ver la primera parte de esa triste historia y AQUÍ, la segunda).

A partir del análisis de esta información encontramos que jubilados y campesinos fueron las dos ocupaciones con mayor riesgo de morir por COVID-19 entre agosto de 2021 y el mismo mes de 2022. Asimismo, las personas mayores de 60 años concentran las tasas de letalidad más altas en todas las ocupaciones, de acuerdo con los datos de la SSa.

En otros temas, las becas de Conacyt y el AMLÓmetro

Para cerrar el recuento, una investigación que publicamos a inicios del año: la disminución en el número de becas para posgrado otorgadas por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt). 

De acuerdo con los datos del gobierno, entre enero y septiembre de 2021 iniciaron 45.3% menos apoyos que en el mismo periodo de 2020. Esta es la mayor reducción desde 2012. Esto quiere decir que entre 2020 y 2021 casi 10 mil personas que buscaban cursar un posgrado en México o en el extranjero tuvieron que plantearse al menos dos opciones: pagarlo con sus propios recursos o abandonar ese plan de vida. 

Y por último, pero no menos importante, el AMLÓmetro. Con motivo del Día del Presidente Cuarto Informe de Gobierno del presidente López Obrador, publicamos la actualización de esta herramienta con la que les damos seguimiento a las 100 promesas que hizo el 1 de diciembre de 2018, cuando tomó posesión de su cargo. 

En esta actualización tenemos que, durante los primeros cuatro años de mandato del presidente, el saldo es de dos compromisos sin iniciar, seis sin información, 11 promesas rotas, 26 cumplidas y 55 en proceso.

Y en este punto de la administración, son cada vez más evidentes las contradicciones del presidente Andrés Manuel López Obrador. Mientras en el discurso dice que defenderá la libertad de expresión, en los actos estigmatiza diariamente a periodistas; mientras prohíbe la producción de maíz transgénico en el país, importa anualmente toneladas del mismo; y, mientras crea una Guardia Civil, propone su adherencia al ejército. 

Este es un resumen del año 2022 en Serendipia. Te esperamos en 2023 para encontrar muchas más historias en los datos.